El flamenco y las sevillanas es algo popular en países remotos: desde Chile hasta Japón. Es el resultado del mestizaje cultural en España de musulmanes, gitanos, cristianos y judíos. Hoy es Patrimonio de la Humanidad, pero no por ello es una disciplina antigua y desfasada. Todo lo contrario, es muy actual y moderno y entre sus representantes abundan corrientes que van desde las más clásicas hasta las muy innovadoras.
El flamenco está de moda
El flamenco está de moda y aprender sevillanas también. Pongamos nuestra mirada en los niños, a los que siempre buscamos actividades extraescolares para ayudarles en su crecimiento. ¿Te has parado a pensar por qué los japoneses lo practican? Porque es una manera de usar la música para lograr una excelente condición física y beneficios psicológicos y emocionales. Controlando los movimientos, descubriéndose a sí mismo.
Es bueno para los pequeños
La danza satisface la necesidad de los niños a expresarse y descubrir las capacidades de su cuerpo saturado de energía. ¿Qué mejor que bailando sevillanas para canalizar esa energía?
Los profesores de danza infantil están de acuerdo en que la edad ideal para comenzar a estudiar flamenco es de 3-4 años porque es el momento de potenciar sus capacidades artísticas y expresivas de manera lúdica. Pero no nos engañemos: nunca es tarde para empezar algo bueno.
El flamenco desarrolla la coordinación psicomotriz, audiomotora, el sentido rítmico y la memoria. Para tu hijo, aprender la disciplina, desde pequeñito, le ayudará en su desarrollo físico, intelectual, emocional y social.
Beneficios del flamenco
Hagamos un listado de beneficios de bailar flamenco o sevillanas para los niños:
- Favorece al crecimiento
- Mejora la postura y flexibilidad. En cualquier rama de la danza, la perfecta colocación de todo nuestro cuerpo es fundamental. De hecho, las primeras clases de cualquier tipo de baile se enfocan en la correcta colocación corporal y así evitar lesiones.
- Acostumbra al alumno a tener una vida activa
- Colabora en el desarrollo muscular: al ejercer fuerza en los movimientos, el flamenco trabaja todos los músculos a la vez.
- Es un buen recurso para combatir la obesidad infantil y el colesterol: principalmente por la descarga de energía y la quema de calorías que se genera en cada clase.
- Estimula la circulación sanguínea y el sistema respiratorio: debido a que es un ejercicio cardiovascular y estimula constantemente nuestro ritmo cardíaco. A la vez que aumenta la capacidad pulmonar.
- Fortalece su autoestima, porque los bailarines de flamenco desarrollan una imagen corporal positiva de sí mismos. Por otro lado, la postura utilizada para bailar flamenco sería la equivalente a la posición tadasana del yoga (oreja, hombro, cadera y tobillo en línea recta), que según los expertos en yoga es una postura antidepresiva.
- reduce los síntomas de estrés o ansiedad: al bailar generamos hormonas de la felicidad (Serotonina y endorfinas) y esto permite que los niños disfruten y se sientan bien con ellos mismos. También, el zapateo ayuda a eliminar el estrés.
- Mejora la psicomotricidad, la agilidad y la coordinación: Con la combinación de movimientos, la velocidad en que se realizan y la estructura de los bailes.
- Mejora sus destrezas sociales porque aprende a cooperar y trabajar en equipo, y a aceptar a sus compañeros pese a sus diferencias.
- Ayuda a rendir más en la escuela porque, al bailar flamenco, al igual que la música u otras artes, favorece el desarrollo mental e intelectual de los niños. (Trabaja la expresión corporal y el oído musical: ya que cada paso debe ser el acompañante de la melodía)
- Mejora su capacidad de concentración
- Ayuda a descubrir destrezas y cualidades nuevas.
- Desarrolla su creatividad, además de sus talentos innatos. si bien es una disciplina, el flamenco tiene el factor “libertad” que hace que los niños sean capaces de improvisar según los parámetros que determine el maestro.
Preguntamos a los expertos
Una de las expertas sobre este tema en Emiratos Árabes es Amalia Megías, directora de Flamenco Art, donde varias profesoras imparten clases de flamenco privadas o en grupo a todas las edades. Amalia nos hace ver también que “en el caso de clases de flamenco o sevillanas en el extranjero, se aprecia más la herencia cultural y el niño o niña se sentirán más orgullosos de sus orígenes”.
La responsable de Flamenco Art nos explica que las clases las imparten en español: “les encantan a los niños ya que, al mismo tiempo, practican su lengua materna”. Amalia concluye diciendo que no todo se queda en clases: “poco a poco les vamos poniendo nuevos retos, mejoramos cada movimiento corporal y coreografías completas, de manera que luego participan en festivales y por qué no, puedan soñar con ser el próximo Jesús Carmona o Eva Yerbabuena. ¿Quién sabe?”